La Propuesta Educativa Reggio Emilia es el resultado de un trabajo en colaboración realizado por Loris Malaguzzi con los centros de educación y primera infancia de la Municipalidad de Reggio Emilia, Italia, por cerca de 50 años. Esta experiencia, iniciada posteriormente a la II Guerra Mundial a partir de la comprensión de que se podía construir, a través de la educación infantil, otra forma de convivencia que no llevara a las atrocidades del pasado, comenzó a suscitar el interés internacional hace 20 años.
Dicha propuesta educativa plantea, entre otras cosas, que la educación debe enfocarse en cada niño, pero no como un ser aislado sino en relación con otros niños, con su familia, los maestros, el ambiente de la escuela, la comunidad, y la sociedad en general. El papel de los maestros exige investigación y aprendizaje continuos que se lleva a cabo con los niños. El maestro debe estar atento a escucharle y observarle al niño sin juzgar, e “indagar en las capacidades infantiles”. Asimismo, se argumenta que cada sociedad crea su propia “imagen del niño”, esto es, la expectativa que tenemos cuando vemos al niño. Esta imagen es el factor principal en determinar su rol en la sociedad, así como en la definición de sus derechos.
Del mismo modo, la imagen del niño está ligada inexorablemente a las políticas y prácticas educativas. Si las imágenes dominantes enfatizan respecto a la infancia el carácter de inmadurez y de reproducción de cultura, la Propuesta Educativa Reggio Emilia ve a los niños como co-constructores de conocimiento, identidad y cultura. La Red Solare, co-organizadora del Seminario, constituye una asociación latino-americana inspirada en la propuesta pedagógica de Reggio Emilia para la promoción de la cultura de la infancia y defensa de los derechos de los niños.
Descargar: La propuesta educativa Reggio Emilia. Una mirada reflexiva hacia la cultura de la infancia.