Esta publicación contiene información sobre el avance de los objetivos de desarrollo del milenio en relación a la mortalidad infantil en América Latina. Así, se abordan algunas experiencias de políticas sociales, investigaciones y opiniones referidas a la temática.
En los últimos años, en el conjunto de América Latina, la mortalidad infantil, aunque de manera heterogénea entre países, descendió aun en situaciones de bajo crecimiento económico y magra reducción de la incidencia de pobreza en el promedio regional.
La persistencia de alta mortalidad se relaciona con bajos ingresos, maternidad adolescente y falta de acceso a servicios básicos y de atención sanitaria oportuna. La magnitud de la mortalidad infantil sigue siendo un indicador importante del nivel de desarrollo social y del acceso a los sistemas de salud, y de la atención nutricional, sanitaria y de protección por parte de la población, sobre todo de niños, niñas y adolescentes. Este indicador evidencia el grado en que una sociedad tiene y ejerce el derecho humano más a la vida y a la salud.